Además de
las variables de sexo y edad, hay muchas otras a considerar para analizar las características
de una población. Algunas de estas son las siguientes.
·
Estado civil: La mayor parte de la población adulta
elige la convivencia en pareja y el matrimonio entre hombres y mujeres. Además se observa un descenso de
la tasa de nupcialidad y las uniones se realizan a edades tardías.
Otro punto a destacar es la creciente fragilidad de las uniones, sobre
todo en los países más desarrollados, con el consecuente incremento en la tasa
de divorcialidad.
·
Composición familiar: Es el incremento de las familias
monoparentales (formadas por uno de los padres e hijos), con más frecuencia
como resultado de un divorcio que por fallecimiento de uno de los cónyuges.
·
Actividad económica por sectores: Son aquellas personas activas que
aportan su fuerza de trabajo para producir bienes y servicios. Están incluidos
lo que tienen empleo, los que lo están buscando por primera vez y los que lo
perdieron pero tratan de conseguirlo nuevamente. Quedan excluidos las personas
que dependen económicamente de los activos, estudiantes, amas de casa y
jubilados.
·
Actividad económica femenina: Es el incremento de la participación femenina
en el mercado de trabajo que se ha dado como resultado de los grandes avances
en la educación de las mujeres y, también, en la importancia otorgada a la
igualdad de derechos sin consideración de género.
·
La planificación familiar: Se presentó como la única
alternativa para evitar las consecuencias de esta situación, asociada con
agotamiento de los recursos naturales y la proliferación de enfermedades,
pobreza y hambre.
Conclusión:
Llegamos a
la conclusión de que analizar las características de una población se hace compleja
ya que hay muchas variables de por medio que pueden influenciar en los datos.
Bibliografía:
Material
dado por la profesora.
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